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lunes, 14 de enero de 2013

Capítulo 27


Carlos no sabe qué hacer. Acaba de conocer a Julia, pero es incapaz de ver a alguien llorar y no hacer nada al respecto. Le han echado de clase, nadie notará su ausencia en el pasillo. ¿Qué hace? ¿Entra en el baño de chicas o espera a que Julia salga? Decide esperar. Los minutos pasan y la chica no sale del baño. Ya ha esperado demasiado. Comienza a andar y entra en el baño de chicas. Puede oír perfectamente los sollozos de Julia. No quiere asustarla, así que dice:
-¿Julia? ¿Estás ahí?
La chica, que no esperaba a nadie, levanta la cabeza, se seca las lágrimas y abre la puerta.
-Estoy aquí.- responde muy seria.
Carlos se acerca a ella y se sienta a su lado.
-No deberías estar aquí, si te pillan pueden llegar a expulsarte.
-Bueno, correré el riesgo. Tú tampoco deberías estar aquí, y mucho menos así. ¿Qué ha pasado?
Julia no sabe por dónde empezar. La verdad es que no ha pasado nada, Marcos sigue sin hablarla y Sergio apenas la presta atención. Eso es todo. Ha pedido permiso al profesor para ir al servicio, y al salir por la puerta, no ha podido evitar echarse a llorar. Son demasiadas explicaciones para alguien que ni siquiera la conoce, así que responde:
-Nada.
-¿Es por Marcos?- dice el chico sin pensar.
¿Qué? ¿Cómo sabe Carlos lo de Marcos? ¿Se lo ha contado Lidia? No, imposible. Ni siquiera ha tenido tiempo. Pero, ¿y entonces?
-¿Cómo sabes tú lo de Marcos?
-En realidad no lo sé. En el recreo he visto que le mirabas mucho, y Clara ha querido contarme algo, pero no le ha dado tiempo. Me han echado de clase.
-Bueno, la verdad es que tiene algo que ver con él…
Julia le cuenta todo lo sucedido con Marcos desde el primer momento. No sabe por qué, pero ese chico la inspira confianza. Él la escucha con atención y, cuando por fin termina, le dice:
-No estés mal por eso. Marcos es un payaso y un prepotente. El otro día estuve con él y demostró ser un imbécil. No merece tus lágrimas, preciosa.
Acto seguido, Julia le da un fuerte abrazo, la verdad es que es un gran chico. En ese momento, Lidia aparece por la puerta y ve la escena. Ninguno de los dos llega a verla, ya que ella se esconde detrás de una columna. Al ver que Julia tardaba demasiado en volver, el profesor la había mandado a buscarla. La chica observa cómo ambos se despiden:
-Bueno, tengo que irme. No estés triste, ¿vale?
-Vale, yo me quedo un rato más.
Carlos se levanta del suelo y sale por la puerta. Unos instantes más tarde, Lidia sale de su escondite y sorprende a su amiga, que la observa a través del espejo. Julia se da la vuelta sobresaltada:
-¿Qué haces aquí?
-El profesor se preocupó por ti y me mandó a buscarte, pero ya veo que estabas demasiado ocupada.
Y, sin decir nada más, sale al pasillo.
-Lidia, ¡espera!-Julia camina detrás suya, pero su amiga no le hace caso.
Llegan a clase y entran por la puerta sin cruzar palabra alguna. Desde su sitio, Manu observa cómo Lidia está a punto de llorar.

2 comentarios:

  1. Dios que bonito!!! Sigue así me sorprendes con cada capitulo!!! Cristina Tudulcelocura!

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  2. Muchísimas graciaas!! :)
    Lo mejor de todo esto es que gente como tú me lea. Muchas gracias de verdad :)

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